sábado, 4 de octubre de 2008

Sobre Otro día...





Palabras saladas y otras que evocan NOSTALGIAS empeñadas en deconstruir y diluir.
Quiero hacer cosas extrañas y saludar a ellas que me han tendido la mano, los abrazos y sus sinceridades.
Vuelvo a escuchar esos sonidos que inspiran acongojamiento y acógonamiento en mi corazón. Estoy pendiente, de nuevo pendiente, que ninguna lágrima cruce la polémica frontera que marca el limite entre el interior de mi ojo, y asumir que he sido débil que puedo llorar como otrora fuerte carcasa.
Son notas compuestas con tal brutalidad que se cuelan en mis oídos y me transportan y me descomponen y transforman en alguien que me resulta penoso y amable. Es un sujeto, extraño y sujeto, frió y lejano y sujeto. Triste, pero a la vez orgulloso.
Hay imágenes que se cuelan por las rendijas de cabañas que no he visitado cociente. Hay conciencias que he dejado en cabañas que he visitado con ellas.
Vuelve la música y el tema que no me deja retener las gotas dentro del limite imaginario de mis párpados.
Lo malo de llorar no es llorar. Lo malo pasa por como la humedad que adquieren los cachetes, y siquiera el mismo ojo, te recuerda todas las otras veces en que se ha humedecido. Es como si a cada llanto nuevo le sumaras todos lo ya vividos, todos los llanto ya sufridos y así para delante suma que suma.
Recuerdo caras de amigos, pero son caras muertas, caras que ya no existen y que no se encontraran jamas. Recuerdo sus sonrisas y sus abrazos y como en nuestras mentes siempre estaba la posibilidad de urdir una nueva travesura. Era excitante y a veces emocionante emprender algo que no sabemos en lo que iba a terminar. Esos rostros... esos rostros que acompañan mi pasado solo se suman a esas melodías que despiertan NOSTALGIAS,  esos rostros ya no serán jamas, ya desaparecieron.
Veo a los que fueron mis amigos, los veo por casualidad ya que la vida separo nuestros destinos a su antojo, y no se que cambio en ellos. Me he preguntado por mucho tiempo como cambian las personas, como cambiaron mis amigos. ¿O será que el mundo sigue igual y yo ya soy un ser extraño mas, extraño para ellos y extraño para mi?
Tengo pena, y hoy no es por mi, no es por ellos y no es por ellas, ni por quienes no conozco. Simplemente hoy tengo pena...

3 comentarios:

ussit dijo...

entiendí todo lo que dijiste. lo entiendo y lo siento.. no sé si importa que lo diga, despues de todo nunca me has visto el rostro..

Topia Kliss dijo...

...¿Y qué sería lo bueno de llorar?

Sr. Ocioso dijo...

Hay veces, en que prefiero sentir ira, por sobre la rabia. Me hace sentir menos vulnerable, y más motivado.