viernes, 12 de diciembre de 2008

Sobre los ejercicios propuestos...





Hoy amigos mios recomendaré un ejercicio práctico de auto conocimiento. Debo advertir que requiere de mucha responsabilidad y que puede llegar a ser peligroso.
Consiste en tener una tarde desocupada, no es mi intención ser reiterativo, pero en absoluto sin nada que hacer. Puedes coger una de esas tardes que dedicas al ocio y utilizarla en el ejercicio. El segundo elemento eres tú mismo, la ropa, los accesorios y demaces los determinaras tú en base a tus preferencia (debo aclarar que sin ningún tipo de reproductor mp3 y/o celular con juegos y esas cosas). En tercer y último puesto debes escoger un lugar, puede ser una plaza de armas, una calle o un mall, o que se yo, lo importante es que sea un lugar por el cual tú transitas cotidianamente.
Entonces enumeremos;

  1. Tiempo desocupado
  2. Tú mismo/a
  3. Un lugar recurrente
Una vez completado el listado procederás a situarte en el lugar elegido y veras a la gente pasar. Veras como transcurren sus vidas. Sentirás como, sin que ellos se enteren, pasas a ser parte de sus vidas como un observador más. No debes tomar notas de campo, ni tampoco ningún tipo de apunte.
Lo importante es que después de transcurrida una hora, o tres, o cuatro empezarás a preguntarte que es lo que tú haces cuando caminas por ese lugar. te preguntaras quienes te observan y quienes son los que son parte de tu vida sin que tu jamas nunca te enteres. En esta parte del ejercicio debo advertir que es peligroso el nivel de ensimismamiento y hasta donde puedes llegar dentro de ti, aunque e de admitir que el problema no es ¿hasta donde puedes llegar? sino ¿hasta donde quieres llegar?



Otra cosa... Los males me asedian, siguen estando en su mismo lugar. Nunca se fueron... solo me demostraban que tienen la capacidad de hacerse invisibles. Me han comprobado que son mas poderosos de lo que yo pensaba, los subestime. Hoy cargo con ellos con mayor fuerza que antes, hoy me clavan agujas que hieren como espadas en mi espalda, mientras ellos sienten regocijo al verme y al sentirme sufrir. Ya estoy cansado, pero no es como antes... hoy estoy cansado y quiero seguir, quiero herirme aun mas y llegar mas allá con este sangramiento que me quita la vida y que a la vez me permite observar de manera que solo los sueños del incrédulo le permitirían visualizar a distancia. Soy pobre de alma, de dinero y de espiritu, pero lo peor es mi pobreza de esperanza, un día existió y la mato la apatía de un mal amor, la carroña cubrio y pudrio la esperanza.

miércoles, 10 de diciembre de 2008

Sobre lo pesado...





Debo partir por decir... por decirte, que te agradezco que me leas. Mi comunicación conmigo es una mierda, por lo cual el saber que me comunico con seres tan extraños como uno mismo, pero en exteriores que jamas nunca compartiré, me resulta por lo menos alentador.

Es así en lo que parto por contaros que sois hijos de todos los males. Lo digo, y lo afirmo, y si es necesario lo reafirmaré, por que me comparto hacia lo que somos, hacia esa construcción del mundo vital (ese pedazo de planeta que nos rodea y nos rejuvenece, nos recuerda que estamos vivos y que nuestro destino inevitable es la muerte. Además nos habla que el valor de la muerte solo lo daremos nosotros, el valor de nuestra existencia se mide desde nosotros). Hoy me siento hijo de todos, y absolutamente todos los males, en mi cabeza hay cientos y quizás miles de marcadores con accesos directos hacia todos los pensamientos malignos que el alma humana puede crear. Mi navegador mental con un solo click imaginario puede transportarme a sitios que no desearía jamas visiten ustedes. Tengo un maldito historial que desaparece y me impide volver y eliminar todos los link visitados.
Pero, como imaginarán, mi vida, y en fin la vida misma, no se puede resumir en una pobre metáfora computacional. El mediocre hardware no soportaría los virus de la imaginación, ni jamas una pobre maquina sentirá el brillo, la intensidad, el calor y el dolor de las pasiones.
Hoy me siento como el hijo de todos los males. Hoy la creación me beneficia con la caracterización básica de todo lo que nos rodea y es ¿acaso vemos bien a nuestro alrededor? me temo pequeños truanes que en pos de una respuesta fácil... si vemos bien, y no me refiero a una buena calidad de la visión, sino a que vemos constantemente obras con una finalidad fraternal, con un bien como forma final. Pero cada una de esas buenas intenciones, traducidas en actos de bondad, de caridad y de cuantos otros cosas se destruye en una forma agónica frente al egoísmo de los muchos.
Así s la cosa. No vengo acá a escribir un lastimoso discurso alentador que te lleve delante de lo que te impide seguir delante. Tampoco te vengo a decir que los problemas y las dificultades son imposibles de sobrellevar, ya tú descubrirás tus potencialidades. Veras cuales son las actitudes que te destruirán y cuales te fortalecerán. Veras como el apasiguante calor del día te invitará a la noche oscura y como de forma lúdica, el frío adormecedor de la noche te invitará a extrañar el ensordecedor calor del día que nunca será el mismo. La nostalgia por lo que fue te podría destruir, pero es la falacia a la que te acostumbrarás, pues en el día de tu muerte, o quizás con suerte absurda antes, te darás cuenta que eres tú el que se destruye con facilidad sádica.

Hay sentimientos y palabras que me identifican; marrón, nostalgia, sutilezas, dolor, pasado-futuro, yo, y tantas otras más.

¿Y a ti?